Adelaide Hills, Broken Hill, Silvertone

Desafortunadamente, la recogida de uvas no tuvo éxito. Nos dirigimos a varios viñedos, pero era el fin de temporada y ya no cogían a gente extranjera, sólo a australianos. Así que decidimos posponerlo hasta que llegaramos a Queensland, que es el fin de nuestro viaje, porque allí empezara la temporada de otras frutas, y, trabajar un par de semanas recogiendo fruta, puede ayudar a recuperar nuestra maltrecha economia, después de casi 3 meses viajando.

Coger uvas no cogimos, pero si que nos bebimos su líquido, jeje. Fuimos a hacer un par de catas de vino, y con la tonteria de que eramos de España y de Francia, donde hay muy buenos vinos, pues nos daban a probar uno y otro, y decíamos, “Mmmm, no se, no se, lo de Francia son diferentes, o los de España son mas fuertes”, etc... Asi que probamos todo tipo de vinos by the face “por la cara”.

El resto del dia no fue nada apasionante, simplemente conducir y conducir hasta que llegamos a Broken Hill, donde hicimos noche en un camping.

Al dia siguiente nos levantamos y nos fuimos, esta vez nos fuimos sin pagar, porque cuando llegamos por la noche, recepción ya estaba cerrada, así que como no hay mucha seguridad, por la mañana hicimos un pequeño escaqueo. Mas tarde fuimos a dar una vuelta por el pueblo de Broken Hill, es un pueblo minero en medio de la nada, aquí le dicen en el “never never”. Visitamos unas minas y el resto del pueblo y a continuación nos dirigimos a Silvertone.

Silvertone es un pequeño pequeño pequeño pueblo, su población es de 4 habitantes, es como un pueblo fantasma en medio del desierto. Pero habia una razón para llegar hasta allí. El pueblo era muy famoso por la cantidad de películas que se habían filmado allí, aprovechando lo desértico del paisaje, entre otras, “Mad Max II” y “Priscila Reina del Desierto”. Al llegar nos encontramos con efectivamente un pueblo fantasma, lo único que allí funcionaba, era un hotel y allí nos encontramos, tachán tachán: el auténtico coche de Mad Max II, os dejo un par de fotos para que lo veáis. La verdad es que fue un dia bastante emocionante.

Después de eso nos dirigimos al siguiente destino, un pueblo llamado Hawker, donde hicimos noche para al dia siguiente dirigirnos a un parque nacional cercano, pero eso, merece otra historia.